residencia en una cantina.

Te encuentras en una cantina. Todo es callado y monótono. Estas aburrido. Pides una copa llena de alcohol etílico. EL mesero te ve extraño pero te la tare. Junto a ti hay un gordo asqueroso que no cierra la boca, solo habla de estúpida política. Le avientas el alcohol y prendes su cabeza. Truenas la copa y empiezas a abrirte el pecho y estómago. Clavas un trozo de vidrio en tu garganta y empiezas a vomitar sangre sobre todas las personas presentes. De tu estómago brotan sangre, tripas y mierda. Todos corren asqueados y asustados. Por fin has roto la monotonía de tu estúpida vida, has logrado que te dejen solo.